Columnistas
La vivienda es uno de los costos que más sube junto con los alimentos
Por Lautaro Moschet (*)
Tras la confirmación del Indec que en febrero el índice de inflación llegó al 6,6% y el incremento interanual superó los tres dígitos con el 102,2% como consecuencia de esto, uno de los impactos que más se siente en el bolsillo, son los aumentos de los costos de las viviendas. No solo de los alquileres que aumentan al ritmo del 90% o 100% en cada renovación de los contratos sino en el mantenimiento del hogar; es decir en el costo de las tarifas de los servicios públicos.
Por ejemplo en febrero el costo de mantenimiento del hogar, según el Indec fue de 5,1%. El porcentaje es estable porque de acuerdo con lo que el gabinete económico acaba de firmar con el Fondo Monetario, se acelerará la segmentación es decir la eliminación de los subsidios en la luz, el gas y el agua, salvo para los sectores más vulnerables. Es decir que este rubro seguirá en ascenso sobre todo entre marzo y mayo.
Se calcula por afuera el valor del alquiler, los valores cambian según el lugar, hay diferencias sustanciales entre el interior del país y las capitales.
Consultado Maximiliano Vittar –titular de Inquilinos de la provincia de Córdoba–, sobre este tema dijo: “En Córdoba el valor de la canasta básica esta en $ 90 mil y ese monto similar, $80 mil, sale el alquiler en la Capital. Hace cuatro años el impacto era del 40% y se fue incrementando. Hoy estamos en un 80 o 90%, del costo en el ingreso familiar”. Con respecto a las renovaciones expresó: “Las renovaciones vienen con muchas diferencias en 100 o 120% de diferencia a la hora de renovar y esto hace que las familias dejen los alquileres y los jóvenes vuelvan a vivir con sus padres”.
El principal problema a la hora de incluir los alquileres en la canasta básica “viene del Indec que no toma el alquiler dentro de los valores que se necesitan para vivir, no se incluye dentro de la canasta básica. Muchas familias achicaron sus gastos. Durante la pandemia un 30% de las familias no podía pagar el alquiler. Hoy rescinden de manera anticipada el contrato, antes de cumplir los tres meses. La mayoría de las familias se endeudan porque no llegan a pagar el alquiler”. Según datos de la Dirección General de Estadística y Censos (Ministerio de Hacienda y Finanzas-GCBA) alquilar un departamento de tres ambientes en 2017 costaba $ 11.535 y en enero de 2023 sale $ 136.103, en Buenos Aires (CABA). En 2020 costaba $ 26.608 y en 2022 $ 69.126. El alza desde 2017 hasta acá supera el 1.000%. Si se calcula el aumento de alquileres cuyos contratos comenzaron en octubre de 2021 y renuevan en octubre 2023, el aumento es por encima del 100%. Otro de los datos, un departamento en junio de 2018 costaba a valor de $ 17.253 y ese mismo alquiler hoy cuesta $ 162.546. (Los valores se tomaron con relación a la base de datos de Argenprop).
Lautaro Moschet –economista de la Fundación Libertad y Progreso– analizó la situación económica en relación a los alquileres y la inflación y dijo: “En los últimos meses, cada vez más propietarios e inmobiliarias deciden publicar el precio medido en dólares para lograr mantener la renta en términos reales. No sería de extrañar que este comportamiento comience a trasladarse en el mercado de otros bienes”.
“Mirando un poco a futuro, no hay fundamentos económicos para creer que la inflación se reduzca y volvamos a tener una moneda estable. No es imposible que esto suceda, pero para ello necesitamos un plan económico que se comprometa a eliminar el déficit fiscal de manera tal que se pueda prescindir tanto del financiamiento monetario como de tomar deuda”, señaló en términos generales sobre la economía general.