Política
Lo nuevo del dúo D’Onofrio-Pombo y un auténtico golpe a la casta
El equipo periodístico de El 1° de la Mañana, que conduce el periodista Claudio Ponce de León, conjuntamente con el presidente de la Coalición Cívica Pilar, Matías Yofe, presentan la primera parte de una investigación que quedará en los anales de la historia local, fundamentalmente cuando se dé a conocer la segunda parte de este informe, que será en los próximos días. Los lectores tendrán la oportunidad de enterarse de, además del monumental plan de corrupción ejecutado por el tándem D’Onofrio-Pombo, el gran entramado que avergonzará a muchos mencionados en dicha investigación y que explicará el estado actual de Pilar. Un auténtico golpe a la casta, prometido por políticos que jamás lo hicieron y que expondrá al intendente De Achával, a los concejales y hasta a integrantes del Poder Judicial. Aparecen en la segunda parte, que al momento de esta publicación se está compaginando hasta la medianoche de este sábado en algún lugar del distrito, encumbrados empresarios, algún ex intendente, un festival de empresas de políticos y allegados, mucho glamour y prostitución VIP.
La pareja hoy imputada judicialmente por lavado de activos y corrupción tejió una enmarañada red de relaciones entre parientes, amigos y favorecedores que la «ayudan» en el manejo de sus negocios. Una pista: la mayoría se desempeña en el Estado, municipal y provincial.
Jorge D’Onofrio y Claudia Pombo son de esas personas que sostienen a brazo partido aquello de «lo primero es la familia», y lo demuestran con una larga lista de parientes que designaron -o hicieron designar- en los distintos estamentos estatales. La municipalidad de Pilar y el Ministerio de Transporte se convirtieron en el refugio de toda esta gente que, al parecer, no puede desarrollar sus capacidades en ámbitos privados. Por supuesto, esto explica claramente la férrea negativa de ambos a renunciar, uno a su ministerio, y la otra a su banca.
Pero vayamos por el principio, y comencemos -por eso de las damas primero- por el clan Pombo, y por una madre de cinco hijos. La señora se llama Elma Basail, trabajó en el municipio de Malvinas, y vive en Moreno, en un campo que habría comprado Claudia y donde se guardarían las donaciones que proceden de Acción Social (municipal y provincial).
Además de Claudia, Elma tuvo a Roxana (también concejal de Pilar), a Héctor Basail Cardozo (casado con Valeria Baro, mano derecha de su hermana más importante, viven en Abra Grande, un sector de Ayres del Pilar, y trabaja en ACARA y el Ministerio de Transporte), a Florencia Basail Cardozo (también trabaja en ACARA y el Ministerio, y está de novia con Fabio Ferretti, que se desempeña en el Ministerio de Educación provincial), y a Matías Cardozo (vive en Moreno y, como sus hermanos y cuñado, trabaja en ACARA y Trasporte).
Aquí hay que agregar a Agustina Cuadra, hija de Claudia, y divorciada de Facundo Asencio, que trabaja en el Ministerio de Transporte con rango de director, justamente, de la VTV provincial), además de ser titular de una constructora y una financiera, y a la prima segunda de la misma Claudia, Marianela Salguero (también en Acara y Transporte)
El grupo D’Onofrio
El ministro, por su parte, no se queda atrás a la hora de acomodar parientes: su hermano Eduardo, ex ministro de Gobierno de la provincia de San Luis, es el secretario de Hábitat de Pilar, mientras su esposa, la de Jorge, María Adriana Ortiz se desempeña en la UFI 4 local.
La nómina se completa con sus hijas: María Agustina trabaja en el Ministerio Público Fiscal emplazado en Villa Martelli, y la pequeña, Delfina, a punto de mudarse a un envidiable caserón del Chateau Pilar, lo hace en el municipio que conduce Federico De Achával.
Amigos y favorecedores
No pueden faltar aquellos que son comunes a los intereses de la pareja, como el chofer Atilio Ormeño (vive en Pinazo, y tanto él como su hijo cobran de ACARA y Transporte), Néstor «Pomelo» Zanabria, y Juan Cruz Costas Bonet (también chofer). Ambos, dicen los que saben, son gentiles prestanombres de cuando la pareja necesita resguardar algún bien de miradas indiscretas, como los autos de alta gama que este último custodia en su propia casa.
Mención aparte aquí para el empresario Aníbal Pigoni, amigo de años (24 por lo menos) de Claudia, dueño de varias agencias de la marca Toyota y conspicuo integrante de ACARA (Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina).
Resulta francamente envidiable el nivel de vida de la pareja D’Onofrio-Pombo, más teniendo en cuenta los ingresos que declaran oficialmente: él, apenas si percibe unos 16 millones al año (algo así como un millón y medio por mes), y ella, como concejal, cobra una dieta de poco más de 800 mil pesos. Así y todo, les alcanza para viajar con toda la familia (y son muchos) a destinos extraterritoriales bastante onerosos, acumular una buena cantidad de propiedades y moverse en vehículos que no suelen verse en las calles de la Argentina.
Será por eso, que en búsqueda de una explicación para tanta bonanza, la justicia investiga a todos y cada uno de los mencionados en esta nota. La dama de ojos vendados quiere saber qué rol desempeña cada quien en esta estructura que la pareja supo montar, por ahora en dos causas: una por irregularidades con le VTV, y la otra por los denominados «borramultas».
De lo que no hay dudas, es de que alguien ampara este accionar: en el distrito, el intendente De Achával, y en la provincia, el gobernador Kicillof.