El IPC sorprendió con un avance del 3,5% mensual en septiembre. Las estimaciones rondaban en torno al 3,0%, por lo que una inflación mensual del 3,5% vuelve a encender las alarmas en meses claves previo a las elecciones legislativas.
Los mayores incrementos se vieron en Prendas de vestir y calzado (6,0%) y Bebidas Alcohólicas y Tabaco (5,9%). También hubo otros rubros que crecieron por encima del nivel general de precios: Salud (4,3%), Restaurantes y Hoteles (4,1%) y Recreación y Cultura (3,8%). Los rubros que menos se incrementaron fueron Bienes y Servicios (2,2%) y Vivienda, Agua, Electricidad, Gas y otros (1,9%). Este último rubro, con tarifas congeladas. Por otro lado, el rubro de Alimentos y Bebidas avanzó un 2,9% en el mes de septiembre.
Con el dato de septiembre, en el último año, sólo agosto obtuvo una inflación por debajo del 3,0% mensual. En otras palabras, 11 de 12 meses fueron con inflación de 3% o más. De esta manera, la inflación interanual cerró en 52,5% en el noveno mes del año. En el acumulado anual, la inflación ya se ubica en el 37%, dejando bien atrás el 29% que estimaba el presupuesto.
Las perspectivas a futuro no son muy alentadoras, la emisión monetaria está volviendo en un contexto donde la demanda de dinero cae. Esta situación no hace más que agravar las perspectivas de una mayor inflación para el próximo año donde probablemente el piso de inflación del 2022 sea del 60%.
(*) Economista Jefe en la Fundación Libertad y Progreso