El jueves 11 de noviembre se cumplirán 20 meses desde que la OMS declarase la PANDEMIA. Diecinueve días más tarde (30/03/2020), el presidente Alberto Fernández, emite un decreto PROHIBIENDO A TODA LA CIUDADANIA SALIR DE SUS CASAS, EXCEPTO PARA LA COMPRA DE ALIMENTOS Y/O MEDICAMENTOS (“Aislamiento Social y Obligatorio a nivel Nacional”).Hasta ese momento en el país, solo había 128 casos de coronavirus y 3 personas muertas.
Los comercios y las PyMes considerados “no esenciales”, junto a un 40% de los argentinos que funcionan en la economía informal reciben un golpe mortal, acentuando las dificultades que habían recrudecido a partir de 2018.
¿Qué aprendimos desde entonces a la fecha?
El origen del virus
Sin dudas, podríamos titularlo: “Las desventuras del Murciélago y el Pangolín en el mercado de Wuhan”. Un “patético” montaje que, durante los primeros meses, les asignaba un protagonismo principal a estos 2 animalitos en el origen y transmisión del virus. Nada mas lejos de la realidad, que el paso del tiempo y las sucesivas investigaciones, no exentas de intereses políticos y económicos, fueron desenmascarando.
El velo se fue corriendo y hoy no hay dudas de que A) el origen del virus NO fue natural, sino fruto de la manipulación del hombre a fin de tornarlo más agresivo y transmisible (Gaino Function). B) Se escapó/liberó (¿?) en China, desde un Laboratorio de alta seguridad, de los pocos que hay en el mundo con nivel 4 (BSL4). C) El monje negro que, desde su posición como director del Instituto de Alergia y enfermedades Infecciosas de EEUU, colaboró con importantes aportes financieros para dichas investigaciones y la “manipulación” del virus fue Anthony Fauci.
Los “casos” de coronavirus
La definición de “caso” de coronavirus jugo un rol central en la definición de Pandemia. De hecho, todas las decisiones y medidas a tomar, se derivarían del numero de casos y su progresión en el tiempo. Por lo tanto, esta “definición” fue modificada por la OMS cuantas veces fue necesario a fin de que los números cerrasen para tan “aterradora realidad”. Vale destacar que la sospecha clínica de “caso”, llegó a ser casi cualquier molestia relacionada a algo parecido a un resfrió común como tener tos, mucosidad, decaimiento, fiebre y alteraciones del gusto o el olfato.
Era tragicómico ver en los consultorios o en las salas de espera, como la gente le temía al hecho de estornudar, toser o soplarse la nariz frente a otras personas por temor a ser señalado como un “portador del mal de todos los males” y consecuentemente ser “chupado” por el sistema de cribaje de la virosis, siendo condenado al aislamiento, testeo serológico, no solo de el sino de todos los seres que hubieran estado en contacto con él en los últimos días.
La “marca a fuego” que resolvía cualquier duda, fue (y, lamentablemente, aun lo es) el famoso test de RT-PCR. Un test que NUNCA fue diseñado para hacer diagnóstico de nada y que como remate fue MAL utilizado (¡¡aún más!!) desde el inicio, aplicando un nivel de amplificaciones tal de las muestras que, distorsionaban totalmente los resultados generando un sinfín de FALSOS POSITIVOS. Traducido al buen romance, se lo utilizó durante todo el 2020 para decir que una persona tenia coronavirus, cuando en realidad la información que arrojaba el test era, cuanto menos incorrecta. Fue como utilizar una lupa de 45 aumentos para ver un tornillo y de ahí deducir que había una máquina.
El llamado de atención de investigadores que trataban de aislar el virus en este tipo de “casos positivos” y nunca lo encontraban, forzó la reformulación del grado de amplificaciones con que debía utilizarse este test, quedando en firme que para detectar al “parecido” a una máquina, la amplificación no debería ser mayor a 20. Finalmente, tras asumir el papelón, la OMS comunicó la reformulación del uso del test en enero de 2021.
No me toques, no te juntes, no salgas, alcohol en los alimentos y hasta en las suelas de los zapatos y si tu ser querido falleció, 100% fue por Covid por lo tanto, velalo a cajo cerrado y quemalo… ¡¡Pero se murió de un infarto!!, .. no importa, quemalo igual!! ….¡¡¡socorro!!
A esta tenebrosa introducción solo quedaría por agregar los perjuicios que se produjeron al confundir “distanciamiento social” con “aislamiento social”. En principio la” distancia” entre personas, una vez liberados los demonios del “terror”, fue de libre interpretación y aplicación según el nivel de temor del que la aplicaba, a pesar de que la OMS ya había informado que la distancia debería ser de no menos de 1 metro.
Como experiencia personal (sin duda debe haber quienes me superan) he llegado a escuchar a personas de 83 años, que permanecieron literalmente “encerradas” en su departamento de 2 ambientes durante 274 días, solo tomando contacto con el exterior a través de la puerta, cuando alguien le cercaba los alimentos. Una verdadera forma de alienación mental prescripta y aceptada voluntariamente. ¡¡Hasta los presos salen a caminar dentro de la cárcel!!
La aparición del los cubre bocas (mascarillas) y el uso del alcohol, tanto liquido como en gel como productos de consumo masivo, deben haber dado lugar a uno de los mayores y explosivos negocios de los últimos tiempos seguidos de cerca por la venta de los saturómetros. Algo que impuso la costumbre de chequear en forma obsesiva la saturación de Oxígeno en sangre y así, ante la menor duda, auto inmolarse y consultar sobre la posibilidad de estar sufriendo la enfermedad.
Un problema, una solución
A la velocidad de la luz, tal era el nombre del proyecto (WarpSpeed Proyect), originado durante la gestión del presidente D. Trump, e impulsado por muchos benefactores de la humanidad como Bill Gates, que ante el asomo de los primeros destellos de la llamada Pandemia por Coronavirus, financiaba a distintos laboratorios Farmacológicos, con dinero de los “taxpayers” (ciudadanos americanos), el desarrollo de vacunas para “salvar a la humanidad” de esta desgraciada situación…..(pero, ¡¡¿¿no dije que el origen virus fue producto de la manipulación humana!!??)
Dentro de los 4 meses posteriores a la declaración de la Pandemia, ya había mas de 140 proyectos de investigación sobre vacunas y sobre finales del 2020 ya se comenzaron a utilizar SIN haber completados los estudios de investigación, tras el otorgamiento de Autorizaciones para Uso de Emergencia por parte de la Administración de Drogas y Alimentos de EEUU (FDA).
La historia resiente
A lo largo de este año 2021, las cosas suenan mas cercanas y no vale la pena ser redundante. El Show de las vacunas, aceptadas en un país y en otros no. Las que son validas en un continente y en otros no. La eficacia según el valor relativo vs el valor absoluto. Si me vacuno, ¿puedo contraer el virus? SI, ¿puedo transmitir el virus? SI, ¿cuál es la verdadera Tasa de Letalidad del Covid? (1.3), ¿es mayor, igual o menor que la Influenza (Gripe)? Similar
¿Ser un país obediente, que se alinea con una vacunación masiva, cumpliendo todos los mandatos de aislamiento, protección con mascarillas y Lockdown, (Israel), asegura el final de la pandemia y todas las restricciones? (la respuesta es NO). Seguirás condenado a continuar con el uso de mascarillas, a no poder relajarte y a repetir, vaya a saber cuantas veces, la aplicación de nuevas dosis de la vacuna por dos motivos: 1-la protección decae a los pocos meses (¡oh!)y 2- aparecen en escena las VARIANTES con el nombre de todo el alfabeto griego (sugiero ir repasándolo).
¿Las vacunas me pueden enfermar? SI. ¿Las vacunas me pueden causar complicaciones graves y la muerte? SI. Los niños, ¿pueden contraer Covid? SI, ¿pueden morir por Covid? Las posibilidades de contraer Covid en los niños es muy baja. La tasa de recuperación es del 99,99% y la mortalidad es menor del 1%.
¿Se conocen los riesgos de las vacunas a mediano y largo plazo? NO. Aun no ha transcurrido el tiempo que necesitan habitualmente estos productos para definir si tiene riesgos de complicaciones de mediano o largo plazo. Eso se verá en los próximos meses/años, en las personas que recibieron las distintas vacunas y cursen las distintas estaciones climáticas con la llegada de las virosis estacionales.
Una mención especial
Me refiero a nuestro querido país al desdichado manejo de la mencionada Pandemia. Especialmente a todo lo referido respecto a restricciones mientras nuestros gobernantes estaban de fiesta ola distribución discrecional de vacunas salvadoras cuando funcionaba un vacunatorio VIP o la amplificación o reducción del operativo “terror”, según las necesidades y el momento político (las elecciones funcionaron mejor que cualquier tratamiento para la reducción de los casos y la drástica reducción de las restricciones).
Solo me queda reiterar la pregunta que titula a esta columna: ¿Ud cree haber aprendido algo de todo lo que ha ocurrido?
(*) Médico cardiólogo, docente universitario, ex presidente del Distrito Conurbano Norte de la Sociedad Argentina de Cardiología, responsable de Arritmias y Marcapasos del hospital Bernardo A. Houssay (retirado), cardiólogo del Hospital Británico, vecino de Pilar.
