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Infopilar en Israel: la angustia de los familiares de los secuestrados por Hamas

Diego Engelbert es argentino, y hace más de 35 años que vive en Israel, donde se mudó con toda su familia. Por estas horas, vive la angustia del secuestro de su hermana Karina, su esposo y sus dos hijas, por parte del grupo Hamas.

En diálogo con este portal, único medio de la región en la zona de conflicto, Diego, un docente de 45 años que vive en la ciudad de Masada, en el centro de Israel, contó que su hermana y su familia residían en el kibutz Niroz, a 1.200 metros de la frontera con Gaza, por lo que estuvieron entre los primeros secuestrados por los terroristas.

Visiblemente conmovido, sostuvo que Niroz «era un lugar tranquilo, del que mi hermana decía que era un noventa por ciento el paraíso y un diez por ciento el mal», donde Karina (51 años) vivía una apacible existencia junto a su marido Ronen (53), y sus hijas Mika (18) y Yuval (10 y medio).  En la foto, la mujer y sus hijas en tiempos de paz.

Su hermano la describió como «chinchuda, pero es mi mejor amiga». «Y aunque tengo otros hermanos, ella es la mayor, y nos sigue cuidando; todos los días nos hablamos por teléfono», recordó, al tiempo que precisó que «ahora estaba atravesando una etapa de remisión en el cáncer que sufre, y su marido también tiene algunas enfermedades».

Engelbert aseguró que Hamas entró a Israel «a sangre y fuego». «Quemaron gente viva, y hasta mataron a los perros», indicó y evidenció su enorme dolor ante la incertidumbre por la suerte corrida por su familia en manos de «monstruos que asesinan por asesinar». Hamas, dice «no son soldados, son asesinos que usan a los civiles como escudos, y en lo único que creen es en la muerte».

También reparó en que «nunca vivimos algo así; lo último fue lo que nos hicieron los nazis en la Segunda Guerra Mundial», mientras refirió que Masada, a unos 80 kilómetros del kibutz donde vivía Karina, «recibe dos o tres ataques diarios, pero está muy triste». «No parece la misma ciudad donde elegí vivir», dijo antes de precisar que «mucha gente amiga está viviendo lo mismo que yo, con sus familiares secuestrados».

Al respecto, sostuvo que «el gobierno está haciendo lo que se puede para recuperarlos», y confió en el pueblo judío, «que es fuerte y vamos a pasar esto». «Vamos a poner luz y volveremos con nuestras familias».

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