Ante la negativa de la provincia, los intendentes reclaman el reparto del Fondo de Fortalecimiento Fiscal

El Fondo de Fortalecimiento, creado a partir del punto de coparticipación que Nación le sacó a la CABA, puso en alerta a oficialistas y opositores. Los alcaldes piden que todo lo que llega en concepto de asistencia se reparta entre los municipios. La provincia dice que no es posible.

Los intendentes van por más. En época de vacas flacas o de vacas gordas irán en busca de más recursos para su distrito. La diferencia entre oficialistas y opositores, más allá de cuál sea el color del gobierno provincial (o nacional) de turno, estará en las formas de realizar el petitorio o reclamo. Kicillof y su equipo lo tienen claro, en ocho meses adquirieron la pertinente experiencia. Quejosos desde el inicio de la pandemia, los jefes comunales le apuntan a la asistencia de Nación.

¿Será coparticipable? ¿Nos tocará algo a nosotros? En voz baja, susurrando y en los grupos de WhatsApp, esas eran las preguntas que se hacían los mandatarios municipales del Frente de Todos que asistieron a la Quinta de Olivos. Apenas habían pasado unos minutos desde que el presidente Alberto Fernández anunció que le quitaba un punto de coparticipación a la CABA para crear el “Fondo de Fortalecimiento Fiscal de la Provincia de Buenos Aires”.

Antes que los oficialistas saltaron los opositores, como era de esperar. A través de un comunicado-carta que suscribieron todos los intendentes, éstos pidieron al gobernador por la firma de convenios del FIM y urgente desembolso de los anticipos para iniciar las obras, mayor celeridad en el proceso de pago de las deudas que mantiene la provincia con las comunas y coparticipación a los municipios de todos los fondos que recibe el Estado bonaerense de parte Nación, entre otras cuestiones.

El ojo está puesto no sólo en el nuevo punto, sino en la totalidad del dinero proveniente de las arcas nacionales. “Nosotros hablamos en términos generales; cualquier tipo de transferencia de fondos de Nación a provincia, si estamos realmente en un sistema federal, necesitamos que la parte correspondiente de esos recursos se coparticipe a los municipios”, afirmó el jefe comunal de Rauch, Maximiliano Suescun, uno de los voceros de la armada boina blanca.

Tal como anunció la administración provincial, parte de ese punto ganado a la Ciudad que conformó el Fondo de Fortalecimiento Fiscal será destinado al aumento salarial de la Policía, y para eso, también, tiene respuesta el referente radical de la Quinta. “En materia de seguridad, que es una competencia provincial, los municipios están pagando el arreglo de los patrulleros, el combustible, las impresoras; un montón de cosas”, señaló.

En la misma dirección agregó: “Entonces queremos que cada peso que recibe la provincia se nos coparticipe a los municipios, porque es cierto que trabajamos de manera mancomunada, que recibimos fondos de la caja bonaerense también, pero tenemos una cantidad de servicios delegados que son de Provincia que ponemos nosotros, y necesitamos, también, la correspondiente transferencia de esos recursos”.

Por el lado de los amarillos aseguran que con este ingreso, la provincia recibirá de parte de Nación desde principio de año hasta ahora unos 100 mil millones de pesos en concepto de asistencia, de los cuales, 75 mil millones son de libre disponibilidad. “Los municipios, algunos más que otros, necesitamos el dinero”, especificó uno de los mandatarios PRO, y añadió: “Por lo menos sentémonos a hablar para ver qué porcentaje se puede coparticipar. Eso es lo que estamos pidiendo. Más que exigir un número, solicitamos que se abra un canal de diálogo”.

Como se dijo, la molestia no abarca solo a la oposición. Los intendentes del Frente de Todos, también, piden por una ampliación de la copa. La bronca, que crece día a día, es para adentro. Para afuera, por el momento, el único que se animó fue Julio Zamora, aunque, claro, con altura y respeto. “Estaría bien que la provincia coparticipe ese punto que recibe de Nación, es necesario que el gobierno provincial ponga la mirada en los municipios”, expresó el mandamás tigrense.

“La situación se va a tornar insostenible. La recaudación local se cayó muchísimo. Estamos en la misma condición que la Provincia, que necesita el dinero de Nación. A nosotros nos pasa igual, es necesario ese ingreso adicional. Tal vez, todo esto no explote a nivel provincial, pero esa explosión se va a dar en los distritos. Si no recibimos esa asistencia, lamentablemente, ese faltante dinero va a tener que salir de los vecinos”, apuntó el alcalde de la Primera sección.

La respuesta no tardó en llegar. El jefe de Gabinete, Carlos Bianco, y el ministro de Hacienda, Pablo López, tajantes, no dejaron lugar a dudas. “Es una transferencia del Tesoro Nacional al Tesoro de la Provincia, que no es coparticipable porque no entra en la Ley de Coparticipación. Después será una definición que tendremos que tomar nosotros la forma en que estos recursos se utilicen, que será a favor de todos los ciudadanos de la provincia de Buenos Aires”, afirmó Bianco, consultado específicamente por el Fondo de Fortalecimiento.

“En términos formales, no está establecido que del punto de coparticipación vaya algo a los municipios; estrictamente, no está dentro del régimen de coparticipación, sino que es un fondo específico que crea el Gobierno nacional que es equivalente a un punto y algo de coparticipación. Y este fondo no tiene como característica establecer un nivel de coparticipación hacia los municipios”, dijo López, casi repitiendo las palabras de la mano derecha política de Kicillof.

Pero los intendentes no se convencen. Ni los propios, ni los ajenos. Y, por supuesto, la mayor preocupación en calle 6 es por los primeros. “Por eso, con la idea de contener el malestar -dijo un mandamás de la Primera-, apuraron los convenios por el FIM (2.000 millones en total) y salieron a anunciar con bombos y platillos los 1.500 millones de pesos (otros 1.500 millones fueron entregados en agosto) a repartir entre los 135 distritos a través del sistema mixto”.

Sin embargo, como se señaló al principio, los intendentes quieren más. Los ajenos y los propios. Todos. Siempre. “En una reunión reciente hubo reclamos no sólo económicos, sino de la política, hasta patadas voladoras le tiraron; Axel no nos da pelota en nada, tampoco en las cuestiones políticas. Le estábamos pisando los talones, está muy complicada la situación. Necesitamos que nos atienda. Todo bien con Teresa (García, ministra de Gobierno), es excelente, pero no alcanza”, sumaron desde la Tercera.

“Hay un tironeo; yo no me quiero meter en ese tironeo, pero existe. Cuando la Nación le sacó el punto a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en off mandaron un listadito de lo que nos correspondería a cada uno de nosotros. Pero la Provincia nos dice que no es coparticipable y los nuestros empiezan a pelearse con Kicillof. Es todo un desgaste, todo es discusión, nos pasamos la vida discutiendo”, detalló otro referente de la más peronista de las secciones.

Los ánimos están caldeados. La pandemia hizo que la plata escasee y las necesidades se conviertan en desesperación, en cruces, en peleas. Alguien tendrá que ceder antes de que la explosión sea una realidad.