Militar todo o legislar nada: las prioridades del Concejo Deliberante de Pilar

Ayer coincidieron en horario la decimo séptima sesión del Concejo Deliberante con el cierre de campaña del oficialismo local. La presidencia del cuerpo, y todos los concejales de ese espacio, prefirieron dedicar sus mejores esfuerzos, por supuesto, al segundo evento.

En la certeza de que los vecinos pueden esperar para resolver sus múltiples problemas, pero no desairar a «Fede» en su demostración a puro aparato en el club Monterrey, en Derqui, la presidencia del Concejo Deliberante de Pilar no vaciló en armar, para una nueva sesión, otro paupérrimo temario que se resolvió en unos 10 minutos.

Como siempre vía zoom, los legisladores aprobaron el acta de la anterior (la decimo sexta), y unas cuantas notas recibidas, con lo que volvió a evidenciarse lo que a esta gente le importa el resto: nada.

Nos cuestan un Perú, pero van a cumplir dos años sentados frente a sus compus, a diferencia del resto de los mortales que hace rato toman hasta tres colectivos para llegar al trabajo, poniendo el cuerpo a la enfermedad (y a la inseguridad). Nuestros concejales, en cambio, no tienen más que esperar a fin de mes para hacerse de sus salarios y dedicarse a gastarlos, sin detenerse a pensar siquiera en el titánico esfuerzo que día a día deben afrontar quienes los abonan.

Un ejemplo palmario de esta actitud desaprensiva y despreocupada para con quienes declaman representar, es la propia presidente del Concejo, Claudia Pombo, a quien -según sus propias redes- pudo verse feliz y satisfecha, acompañada por su pareja, el diputado Jorge D´Onofrio, liderando un grupo que provisto con bombos y redoblantes cantaban, saltaban y bailaban al ritmo que desde el escenario imponía el cacique gobernante.

Puntualmente, la señora Pombo twuiteó: «Hoy, junto a @FedericoAchaval y todos los compañeros del @FrenteDeTodos #Pilar dijimos #Presente en el Club Monterrey, para contar a todos los pilarenses que nuestro compromiso es con el trabajo, la educación, la seguridad y el crecimiento de nuestro país, y no el del ajuste», lo que mucho no se advierte entre sus quehaceres como una de las principales autoridades del distrito.

El jueves, Pombo la pasó bomba como parte que es del grupete más beneficiado del país y de Pilar, que no se priva, que no resigna, que no pierde, que no sufre. Quizás todos debiéramos dedicarnos a la política.

(A.S.)