Sorpresa y dolor por la tragedia de la familia Bottarelli

Los allegados al reconocido comerciante Pedro Bottarelli, de 90 años, que el martes por la noche le disparó a su esposa de 88 años y luego se suicidó en su vivienda en el centro de Pilar, no encuentran respuesta a tamaña tragedia.  Las autoridades, por su parte, aún investigan las circunstancias del hecho.

En una trágica jornada para la comunidad de Pilar, el reconocido comerciante Pedro Bottarelli, de 90 años, mató a su esposa de 88 años con un disparo y luego se quitó la vida en su vivienda ubicada en la calle Ituzaingó al 400, en el centro del distrito. Ambos fueron hallados sin vida por las autoridades en la tarde de este martes, alrededor de las 17 horas, según informaron fuentes oficiales.

Aunque las circunstancias exactas del hecho aún no fueron esclarecidas, la conmoción en la localidad es evidente. Pedro Bottarelli era conocido en la comunidad por su larga trayectoria en el comercio de autos y por su participación activa en la vida social y política del distrito.

Durante su vida, Bottarelli integró la Comisión Directiva de la Cámara de Comercio de Pilar (SCIPA) y fue presidente del Club Atlético Pilar a mediados de la década de 1980. Además, fue uno de los fundadores del canal de cable VIP en 1990, un proyecto que tuvo una significativa repercusión en la programación local. También tuvo una destacada participación en el Comité de Distrito de la Unión Cívica Radical.

La noticia generó un profundo impacto en Pilar, donde Bottarelli era ampliamente conocido y respetado. Había cumplido 90 años apenas el pasado 29 de junio, y desde su San Nicolás de los Arroyos natal, se convirtió en uno de los protagonistas de la vida comercial y social del distrito.

A los 16 años comenzó a trabajar en la agencia Ford Tarsia de Pilar, donde descubrió su pasión por la mecánica. Su primer sueldo le permitió comprarse una bicicleta, iniciando así su amor por el ciclismo. Tras el cierre de la agencia Ford, Pedro continuó su carrera en Mercedes hasta que, a los 20 años, decidió independizarse. En 1955, alquiló un galpón frente al Automóvil Club y estableció su propio taller mecánico junto a su hermano Jorge Alberto, conocido como Pinky.

En su taller, Pedro no solo reparaba autos, sino que también compraba vehículos averiados para arreglarlos y venderlos, iniciando así su exitosa trayectoria en el comercio de automóviles. Esta pasión lo llevó a fundar la agencia Bottarelli Hermanos, que durante más de 50 años operó en la esquina de Pedro Lagrave y Belgrano, en pleno centro de Pilar.

En lo personal, Bottarelli llevaba 66 años de casado con Elida Alicia González, y fue padre de dos hijos que lo hicieron abuelo de seis nietos y bisabuelo de siete bisnietos.