Concejales solidarios: Adrián Maciel es el nuevo Defensor del Pueblo de Pilar

Se quedó sin reelección en el Concejo Deliberante donde lleva nueve años -hasta este 10 de diciembre-, pero por la generosidad de sus colegas fue elegido entre 20 aspirantes para ocupar el cargo de Ombudsman del distrito por los próximos cuatro.

Este jueves, en sesión ordinaria y por unanimidad, el concejal Adrián Maciel fue ungido en el cargo que en unos días dejará el radical Juan Manuel Quintana, quien, a su vez, pasará a formar parte del Concejo Deliberante al haber accedido a una banca de la mano de La Libertad Avanza.

Esta suerte de enroque, por lo visto, satisfizo a todo el mundo, no sólo a los concejales que de esta manera hicieron su aporte contra la desocupación, sino también al mentor de Maciel, el prensero de Federico De Achával, César Mansilla, en otro notable avance sobre la institucionalidad del distrito.

Quién es Maciel

Es un abogado de 49 años que además de la «banca» de Mansilla cuenta a su favor con el parentesco cercano del ex SIDE Miguel Ángel Toma -es su sobrino-. Fue opositor a Nicolás Ducoté hasta que empezó a votar junto al oficialismo desde 2017, cuando rompió su relación con Jorge D’Onofrio, a quien le debía absoluta… ¿lealtad? Pero su derrotero con el poder viene de mucho antes.

Sus relaciones familiares le permitieron darse el gusto de ser vicecónsul argentino en Estados Unidos, con oficina en Miami. De regreso al país se le “facilitó” el acceso a una candidatura a concejal. Luego fue un par de años de jefe de la bancada massista hasta que se convirtió en un legislador de Cambiemos sin el rótulo oficial.

Intentó ser concejal siendo candidato de Luis Abelardo Patti; también con Francisco De Narváez; y finalmente lo logró con el Frente Renovador de Sergio Massa.

En el 2019 tuvo su lugar en la lista de Ducoté en Cambiemos, a quien traicionó a los días de asumir su banca tras la derrota del ex intendente en manos de su nuevo jefe, Federico De Achával, socio del mismo presidente del club -el de Mansilla- al cual Maciel le debe pleitesía.

Cuentan por ahí que el mismo Maciel formó parte de los Servicios de Inteligencia del Estado, operando como agente encubierto lavando copas en un bar, pero apadrinado por un político importante de esa época. Si, también fue súper agente según cuentan las leyendas urbanas de  de Pilar.

Y haciendo gala de su oficio de no hacerse visible salvo cuando es necesario, fue el concejal que con su desaparición misteriosa del recinto del HCD al momento de votar el último Código de Organización Territorial que pidió el oficialismo, facilitó la aprobación de esta ordenanza que dejó las manos libres al intendente De Achával para expropiar tierras ociosas del distrito para uso con fines políticos.

Por último, se declaró primero ritondista y después bullrichista, ocupando el primer lugar de concejal de la lista que encabezaba Adriana Cáceres que perdió la interna de Juntos y, en consecuencia, la posibilidad de volver al Concejo.