Pilar: el PRO y su inquebrantable vocación por la derrota

Mauricio Macri está cada vez más solo, y ya no puede contener el goteo permanente de sus principales figuras, que, seducidas por el «carisma» de Javier Milei, emigran sin pausa ni disimulo, hacia las filas de LLA.

Poco queda en la provincia de Buenos Aires del espacio que el ex presidente encomendó conducir a Cristian Ritondo (que además sigue sumando denuncias por sociedades offshore y enriquecimiento ilícito), y frente a la notoria desertificación, no tiene más remedio que apelar a figuras que ya han demostrado su incapacidad de ganar una elección

Porque una cosa es acceder a una banca de concejal, y otra, muy distinta, ganar un comicio y hacerse de más poder que, a su vez, retroalimenta las pretensiones del partido.

Es lo que ocurre con el PRO Pilar, donde los únicos que aparecen como alternativa electoral -aunque más no sea para renovar sus mandatos en el Concejo Deliberante- son Sebastián Neuspiller y Analía Leguizamón. Quizás con estos nombres alcance para hacer algo de presencia, pero seguro que no para un triunfo incuestionable que haga cambiar de manos la conducción política del distrito.

En el caso de Neuspiller, baste recordar que en las elecciones pasadas, las del 2023, como candidato a intendente -y con la parafernalia de Juntos atrás- apenas si logró menos de un tercio (36.565 -el 17,35%- contra 121.094 -el 57,7% del oficialismo-).

Al «Dandy», dentro del PRO, lo único que lo contiene es su amistad con Mauricio, con quien comparte la pasión por el fútbol.

El resto de la Primera Sección

En la sección del noroeste del conurbano, que pondrá en juego ocho bancas del Senado, el PRO cuenta con figuras como Segundo Cernadas en Tigre y Gastón di Castelnuovo en Ituzaingó. Otra figura destacada es la del ex intendente de General Rodríguez Darío Kubar.