Universidad de Pilar: Un acto con autoridades nacionales para presentar el proyecto (¿?)

No hay dudas de que los tiempos cambian, y lo ocurrido hoy en el complejo «Carlos Pellegrini», uno de los más tradicionales del distrito, así lo demuestra, ya que se reunieron un ministro nacional, un diputado nacional, otro  provincial, el presidente del ENACOM y un intendente para presentar un proyecto de ley, aquel que promueve la creación de la Universidad de Pilar.

Acto de estas características y con la presencia de tan encumbrados personajes no registra antecedente alguno, por lo menos en esta parte del país, acostumbrados como estamos a que semejantes despliegues se realicen ante  hechos concretos, y no frente a lo que todavía no pasa de ser una mera expresión voluntarista, encima ajena.

Porque lo que ingresó a la Cámara Baja de la nación es el deseo de la diputada Adriana Cáceres para dotar a Pilar de una universidad. La iniciativa recibió el apoyo de la mayoría de sus compañeros de bancada; es decir, de Juntos por el Cambio, que se sentaron a esperar que reciba la aprobación del cuerpo para comenzar, recién, a delinear una Casa de Altos Estudios.

En síntesis, la tan mentada Universidad sólo existe en los papeles, y como sucede en estos casos, tardará un rato largo en plasmarse en la realidad. Sobre todo en estos tiempos de crisis, prioridad absoluta a la hora del financiamiento. Porque sólo un iluso puede creer que una institución de esta envergadura no requiere una inversión millonaria, aún cuando se disponga de un espacio físico.

El caso es que, al parecer, como fuera de la emergencia sanitaria no hay muchos más actos de gobierno que mostrar, alguien manoteó esta expresión de deseos y buscó colocarla como un logro de gestión sin pensarlo demasiado, convencido de la necesidad de recuperar la centralidad frente a la decepción generalizada de una opinión pública díscola, que ya comienza a mostrar su fastidio contra sus gobernantes.

Saben que la luna de miel se terminó, y de la peor manera. Que en apenas seis meses una de las partes ya está preparando los papeles del divorcio, sin ningunas ganas de reconciliarse.

El caso es que Nicolás Trotta, Sergio Massa, Jorge D´Onofrio, Claudio Ambrosini, y Federico De Achával, ocuparon sus asientos en la cuidada escenografía dispuesta para la ocasión y con toda pompa y circunstancia procedieron a presentar (¿?) el proyecto. Hablaron de sueños, de movilidad social, de gratuidad, de inclusión, de igualdad de oportunidades, de identidad y pertenencia, de capacidades técnicas.

Lo único que no hicieron fue fijar una fecha para el comienzo efectivo de las clases y cómo habría de financiarse la futura Universidad Nacional de Pilar.

(A.S.)