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Macri estaría apadrinando una alianza para que los libertarios pierdan en Buenos Aires
Por Carlos Tórtora (*)

Mauricio Macri no sólo aparece poco en la escena política sino que deja correr la versión de que estaría preparándose para retirarse definitivamente de la vida pública. Sin embargo, algunos miembros de su entorno deslizan exactamente lo contrario. Esto es, que está trabajando reservadamente para vengarse de la ofensiva de Javier Milei luego del triunfo de Manuel Adorni en la elección porteña del pasado 18 de mayo.
El presidente no sólo lo jubiló con sus dichos a Macri, sino que le impuso al PRO una negociación muy desventajosa de su alianza con LLA, al punto que hasta ahora Cristian Ritondo, el principal promotor del acuerdo, no puede conseguir que Karina Milei y Sebastián Pareja moderen sus pretensiones de quedarse con casi todas las candidaturas para la elección del 7 de septiembre.
El caso es que el expresidente estaría alentando discretamente la conformación de una alianza en la que convergerían algunos intendentes y legisladores del PRO: Margarita Stolbizer, Emilio Monzó y varios dirigentes del peronismo disidente, entre ellos el senador provincial Joaquín de la Torre, muy cercano a Macri.
En este armado que se estaría tejiendo entraría también una buena parte de la UCR bonaerense. Esta nueva alianza de centro, si se concreta, podría hacerle perder la elección bonaerense a LLA, ya que despolarizaría parte de los votos pero en su mayor parte le restaría votos a los libertarios. De este modo Macri, mientras se hace el desentendido, estaría alentando un plan para que el gobierno pierda en septiembre y quede debilitado para la elección nacional del 26 de octubre.
Una cuenta clara
Si LLA pierde en las urnas, sería entonces probable que Macri vuelva a cotizarse políticamente, porque la debilidad de Milei lo obligaría a buscar su apoyo para evitar una rebelión del Congreso que podría terminar en un pedido de juicio político en su contra. En cambio, si los libertarios ganan las elecciones, el PRO quedaría a un paso de su disolución y LLA se convertiría en el partido hegemónico de la derecha. De este modo, las circunstancias hoy harían que Macri esté funcionando como un aliado táctico del peronismo.
La sensación imperante de que el acuerdo entre LLA y el PRO en Buenos Aires es un fracaso, sería entonces un contexto más que favorable como para que se concrete un nuevo proyecto electoral.
(*) Abogado administrativista. Director del portal El Informador Público, ex secretario Legal y Técnico de la comuna de Pilar (administración Bivort)